La CeAQUA denuncia que en la vista del torturador Jesús Muñecas Aguilar la fiscalía no ha ejercido de acusación, sino que ha coincidido con la defensa en oponerse a su extradición

Con esta decisión el Estado español vuelve a impedir el acceso a la justicia a cientos de españoles, e inicia su andadura como refugio internacional de criminales franquistas.

Madrid, a 04 de abril, 2014.- Ayer por la mañana a las 09:50 entraba Jesús Muñecas Aguilar en la Audiencia Nacional para sentarse en el banquillo de los acusados. Se trataba de la vista para decidir su extradición- o no- con el fin de que respondiese ante la justicia argentina por crímenes de tortura cometidos en la última etapa del franquismo.

Los asistentes  han observado una vez más el enfoque que suele adoptarsepara archivar las causas contra crímenes franquistas: considerarlos actos aislados de tortura y no una práctica sistemática que permite inscribirlos en el contexto de crímenes contra la humanidad en el que se han producido.

Como actos aislados se los sujeta, entre otras limitaciones que establecen las normas penales para los delitos ordinarios, a plazos de prescripción que extinguen la responsabilidad penal. Pero todos esos argumentos se pueden sintetizar en una frase: para la justicia española ya no existe la justicia universal. Sin embargo, lo más significativo es que esos argumentos no han sido esgrimidos sólo por la defensa, sino también por el fiscal. No hubo posibilidad alguna de que se alzase una voz que hablara en nombre de las víctimas.

Para la CEAQUA el desarrollo de la vista no es una sorpresa, dado que  la justicia española lleva décadas archivando casos contra el franquismo.  Ahora no sólo deniega justicia  a las víctimas del franquismo en nuestro Estado, sino que intenta obstaculizarles el acceso a la justicia universal.

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